Google ya no se esconde.

Desde que salió la nueva versión del sistema operativo de Google, Android 4.4  Kit Kat han sucedido cosas incomprensibles a no ser que sean un claro ejercicio de prepotencia y de dejar claro quién manda y que hacen lo que quieren. En las próximas líneas vamos a intentar plasmar como una empresa ejecuta unas directrices según le convence y cómo actúan sin que nadie les diga nada. Sin más vamos a empezar el recorrido por la última gran maniobra de Google.

Nexus 5 vino envuelto de Kit Kat, el nuevo sistema operativo que lleva por bandera el poder ser instalado en terminales de poca memoria con lo cual habrían un enorme abanico de posibilidades para aquellos terminales más flojos. Bien la primera en la frente fue que el Galaxy Nexus (el Nexus que hizo Samsung) no iba a recibir Kit Kat. Los usuarios pusieron el grito en el cielo con toda la razón del mundo, incluso se están juntando para poner una denuncia en común.

Ahora tres semanas después del lanzamiento ha salido la noticia que va a irritar a muchos usuarios y empresas. Resulta que el Motorola Moto X, empresa de la cual es propietaria Google, acaba de anunciar el lanzamiento de Kit Kat de manera oficial. Esto sin lugar alguna crea un precedente importante, principalmente porque no es normal que Google venda Nexus como el teléfono de los desarrolladores que recibe antes que nadie las actualizaciones oficiales y que de golpe y porrazo, un teléfono no Nexus la reciba de manera oficial antes que los demás Nexus que recordemos que a día de hoy todavía no tienen esa actualización y que según como venden el producto, todos los Nexus deberían tener esta actualización, incluso el Nexus One.


Con esta maniobra de Google sin lugar a dudas se desata la guerra con todas las grandes empresas de telefonía, Samsung, LG principalmente ya tienen claro que es lo que pueden esperar y queda claro que Google ya ha movido ficha y ha dejado claro quién manda y quien hace lo que le viene en gana. Lo que no se si tiene en cuenta Google es el volumen de usuarios que pueden revelarse contra ellos por semejante maniobra, aunque estamos seguros que eso ya lo tienen en cuenta y cunado la olla empiece a estar muy caliente los apaciguaran con su ración de Kit Kat (hoy es oficial su llegada a Nexus 4).

Conclusiones: era evidente que Google tenía que tirar tarde no temprano por beneficiar a Motorola en relación a las demás, principalmente porque para eso la compró. Pero lo que nadie se hubiera imaginado es que se atreverían a un movimiento de estas características. Para muchos les puede parecer un detalle insignificante, pero para aquellos que miren más allá, es una declaración de guerra en toda regla incluso para su actual fabricante del Nexus 5, LG, a la cual le debe estar empezando a quedar claro que Google juega con ellos y que por segundo año consecutivo le han reventado las ventas de su producto estrella, el LG G2, quizás algo tarde pero bueno. Cada vez queda más claro que el futuro más próximo de Android es que el Nexus se fabrique de manera indefinida en casa de Motorola (Google), aunque todo puede cambiar con las ventas, puesto que Motorola no tiene la confianza de los usuarios y aunque la inyección de Google seguro que la cuota de mercado va a superar de manera exagerada. Veremos próximos movimientos, pero queda claro que la fractura con las compañías es total.