Póntelo, pero no se lo pongas.

Me gustaría compartir con vosotros lo que pienso sobre un gadget que convive con muchos de nuestros dispositivos, estoy hablando de las fundas, condones, protectores..., hay mil formas de llamarlos, no tienen un nombre establecido pero tienen mucha cuota de mercado.

Haciendo un símil con una campaña publicitaria sobre preservativos quería introducir el tema "Póntelo, pónselo". En este caso creo que es precisamente lo contrario y quiero dejar claro desde el principio que no estoy en contra de este producto, simplemente que creo que su uso debe estar destinado para unos casos en particular.

Fundas las hay de todo tipo, colores, formas, graciosas, siniestras, hay donde elegir en un abanico muy amplio de posibilidades. Pero el problema es que esas fundas o protectores nacieron con la idea de proteger nuestro terminal, y a día de hoy sin usados como elemento decorativo. Por eso mi preocupación, se ha montado un negocio entorno a un elemento nacido para otra cosa. Las empresas gastan miles de millones en diseños y patentes del diseño de sus terminales y todo para que luego le pongan una funda de la Hello Kitty o peor.


Tenemos los fanboys de Apple que hacen lo mismo pero siempre respetando la manzana, como si fuera un símbolo sagrado al cual no se puede tocar, cuando en verdad están destruyendo todo el encanto del terminal. No estoy en contra, pero creo que su uso se debe limitar a trabajos donde los golpes o caídas sean habituales o situaciones similares. Tener un terminal con funda entiendo que es por personalizarlo, pero es que entonces no le veo el sentido a comprarse un modelo u otro si en el fondo lo vas a tapar.

Lo triste es que los fabricantes en vez de poner el grito en el cielo, han claudicado y se han apuntado a la moda, haciendo de un sacrilegio un beneficio. Queda claro pues que esto es un negocio que mueve mucho dinero, pero a su vez es un peligro puesto que muchas de estas fundas no pasan los controles de calidad y certificados necesarios y luego nos encontramos con desagradables sorpresas, y de la gracia de tener nuestro móvil personalizado, acabamos teniendo un excelente pisapapeles.

Casos donde las fundas han calentado mucho el procesador o la batería y eso ha derivado en que el dispositivo deje de funcionar, o casos donde el producto no estaba perfectamente adaptado y ha fastidiado un botón o ha estado encendiendo durante horas la pantalla por un mal contacto los hay a patadas. Con esto no quiero meter miedo a nadie para que deje sus fundas, simplemente expongo el tema y mi postura frente a estos gadgets.

Conclusiones: las fundas son lo que son, elementos que deben proteger al dispositivo en situaciones de riesgo y nada más. Si se ponen fundas deberían ser homologadas para evitar problemas como fallo de botones y calentones innecesarios, y eso supone apostar por las oficiales, y personalmente creo que bastante nos cobran por los terminales como para ampliar su beneficio aún más. Por todo ello soy totalmente opuesto a las fundas